Con el viento en contra

Los CEOs operan en un mundo conectado y de constante cambio. Esperar y ver ya no es una opción. Los máximos ejecutivos deben actuar con liderazgo en cuestiones como la ciberseguridad, especialmente las vulnerabilidades que puedan surgir en sus ecosistemas empresariales de socios o proveedores. Y deben introducir la geopolítica en la agenda, para comprender el riesgo que ésta puede generar en sus finanzas, negocios y modelos operativos. Para afianzar el crecimiento futuro, deben estar atentos a los cambios demográficos, a los gustos y necesidades de las nuevas generaciones.

Crecimiento realista

La confianza de los CEOs sobre la situación macroeconómica es positiva, aunque en España la incertidumbre política ha dejado su huella al igual que en otros países de Europa. No obstante, las proyecciones que hacen los directivos sobre los ingresos en los próximos tres años reflejan altas dosis de pragmatismo, cautela y conciencia plena de que hay muchos riesgos por gestionar y que lleva su tiempo reemplazar los ingresos tradicionales por otros nuevos. Los CEO están desempeñando un papel activo para impulsar la innovación dentro de sus organizaciones.

La cruzada digital

Los máximos ejecutivos empresariales se están implicando personal y directamente en dirigir el proceso de transformación digital. Para garantizar que esta estrategia no descarrile por la presión de presentar resultados a corto plazo, los CEOs deben gestionar las expectativas de los diferentes stakeholders, incluido el propio consejo de administración. Aprovechar al máximo los datos es un elemento crítico de la estrategia de crecimiento, pero también es clave actuar con ética y transparencia en la gestión de los datos de clientes. Los CEOs necesitan liderar la transición de sus profesionales a un mundo en el que la Inteligencia Artificial y la robotización irán adoptando las tareas más rutinarias y deberán explicarlo de manera clara y sincera a la plantilla.

Instinto frente a datos

En un mundo de constante cambio, la agilidad de respuesta es clave. Para dotarse de esa agilidad, muchas organizaciones están creando redes de innovación o ecosistemas empresariales mediante alianzas con terceros. Pero estas alianzas no son tan sencillas como parece para extraer el retorno que se busca: los CEOs necesitan encontrar la forma de superar las barreras detectadas en esta vía de crecimiento, como son las diferencias culturales. La agilidad también se consigue detectando nuevas oportunidades y utilizando de forma efectiva sofisticadas técnicas de analítica de datos, tanto predictiva como prescriptiva. Los CEOs que logren combinar su experiencia e intuición con los insights que aporta el Data & Analytics conseguirán mejores resultados en su empresa.